"escucharás al fondo un corazónque antes dictaba en secreto los pulsos de la soledad"
Álvaro Solís
Hoy recorrí la ciudad después de años infames de claustro
Logré ver a un albino paseando un oso salmonero justo debajo de un monstruoso hormigón con los castillos salidos
Hoy volví a ver tu foto y solo pude pensar en la única vez que pudimos recordar tiempos más simples
Ahí, en esa parte oculta de la ciudad donde hubo tantas promesas falsas a Dios y tantas maneras equivocadas de hacer nuestros rezos que terminaban una y otra vez en ser jirones y jirones
Hoy vi a tres drogadictos tratando de arreglar a patadas un huacal de tercera
Mientras caminaba por toda la Cuahutemoc la única imagen que quedó grabada en mí memoria era pensar
en qué no tenías la ropa adecuada para un novenario
y mucho menos para un levantamiento de cruz
Evidentemente no podremos seguir diciendo que con la edad nos llegará la sabiduría
tal vez esta fue la muerte que tomó la propia nuestra
Mientras el regazo de la tarde siguió dejando que cayeramos al atravesar los cerros que se erguían a nuestro paso
Te prometí que seguiré haciendo un esfuerzo para no repetirme nunca más
mientras tú haces un esfuerzo por no volver a tomar mi mano
Sé que está demás decir que ya no sé si seguiré siendo el mismo de antes
Pero también sé que hay que decirte
que hay algo que se asoma al final del camino que no parece darnos más fuerza
Que casi olvido buscar en estas mentiras todo lo que alguna vez te dije
¿No te das cuenta de todo lo que haría por ti?
Yo ya lo entendí todo
Yo al fin lo supe todo
Sé que hoy amaneciste con el corazón roto
Sé que sabes que yo también
Sé que las pesadillas apenas están comenzando
Que a este mapa siempre la ha faltado su flecha del norte
Y en un último esfuerzo
Me quedo
Me muero
Pero me quedo